Cientos de miles de artículos, conferencias y charlas en la internet intentan responder a una pregunta que todo emprendedor se hace tarde o temprano en su recorrido:

¿Qué es lo que hay que tener para ser exitoso como emprendedor?

Las respuestas son tan variadas como la enorme cantidad de autores que encaran el tema:

Disciplina, liderazgo, contactos, determinación, continuidad, ideales de libertad…son solo algunas de las muchas características que se intentan argumentar que todo emprendedor “necesita” tener para ser exitoso.

Lo vemos tanto en los emprendedores reconocidos por sus logros, como en los que están en pleno proceso; todos acuerdan con estas características. Y no sería fácil ponerse a argumentar que no se trata de alguna de esas, ya que claramente ayudan.

Además, tienen a favor que todas son desarrollables por cualquier persona. Están al alcance de quien se lo proponga.

Sea algo como la disciplina, que se puede desarrollar con férreo entrenamiento, o algo del estilo de los contactos, que con inversión de tiempo en redes personales; todos son posibles de alcanzar; todos los puntos están al alcance de quien quiera ponerse en marcha hacia eso.

Pero hay una característica extra que los mismos artículos, los emprendedores, inversores y todo “experto” del tema nombra como absolutamente clave. Y, lamentablemente, los paradigmas actuales nos han enseñado que esa clave no es desarrollable, y que si no te tocó en suerte…entonces no la tendrás.

Esa clave es, precisamente, La Suerte.

No hay emprendedor, experto o inversor que no diga que el Factor Suerte es absolutamente Determinante en cualquier emprendimiento.

Históricos del mundo de la computación como Steve Jobs o Bill Gates, o más actuales ya del mundo interconectado de la Internet como los fundadores de Google, Airbnb o Facebook contaron con Eso, y al mismo tiempo lo nombraron como clave en todo su proceso emprendedor.

La fortuna económica que lograron dependió una y otra vez de la “fortuna” que lograran que los acompañe.

Eso mismo encontramos si recordamos a los Mitos e Historias de Héroes; casualmente allí la suerte también los acompañó.

Hablemos de Alejandro Magno, Julio Cesar, San Martin, por nombrar a algunos, todos tuvieron en cada una de sus aventuras un grado de suerte que los diferenció totalmente del resto.

Como si algo Divino los acompañara en cada paso, ayudándolos a vencer probabilidades que les jugaban en contra una y otra vez. Una ayuda especial parecía descender sobre ellos, y los acompañó para que la fortuna se haga presente también en sus historias y victorias.

Retornando al presente, vemos que cientos de años de educación occidental-científica han tratado de convencernos de que la suerte es algo absolutamente arbitrario. Como si algunos la tuvieran y otros no. 

Pero muchas culturas de la historia de la humanidad, y las que han logrado los grados de desarrollo espiritual más elevado, tomaban a la suerte como Algo a Lograr.

Y quien lograba Eso era considerado con un contacto especial con lo Divino.

Sabemos que plantear un cambio de lugar desde donde pensar a la Suerte implica, entre otras cuestiones, un cambio de Paradigma.

Si aceptamos que la Suerte es algo Lograble, tenemos que empezar a hacernos preguntas más personales.

¿Por qué a veces se me acerca? ¿Por qué tantas veces se me aleja?

Preguntas que rompen paradigmas, ya que ponen a la suerte como algo causado por cada persona! Y Eso nos Transmitieron los Mitos y Enseñanzas que nos han Legado las Culturas Iniciáticas!

Culturas que la Investigación de José Luis Parise Integró y Ordenó en un Método que nos permite Conectarnos directamente con Esa Fuerza.

Todas esas culturas, como Paso Fundamental en el Camino hacia poner a la Suerte a favor de cada Quien, Invitan realizar lo que esos Héroes Mitológicos -e históricos- hicieron: Dirigirse a hacer posible lo que les parecía absolutamente imposible de lograr.

Sea conquistar al mundo conocido, liberar un continente o reinventar lo que conocemos como mundo tecnológico…cada Emprendedor que logró poner a la Suerte de su lado lo hizo Dirigiéndose a Resultados que les parecían imposibles.

Los Héroes siempre tienen a la Suerte de Su Lado, y un Primer Paso para Convertirse en Héroe es Decidirse a Emprender un Viaje Heroico, un Viaje hacia lo que de antemano nos parece imposible.

Un viaje que nos asegure que para Lograrlo necesitaremos, sin duda alguna, la ayuda de la Suerte!

Ahí la Suerte es Invitada a Nuestro Viaje…! Y Eso es solo el Inicio.

Javier Derderyan

Septiembre 2018

Publicado originalmente en http://zonaholistica.com/la-fortuna-del-emprendedor/